Tagliatelle con cigalas

Me encantan las cigalas. Uno de mis platos preferidos son las arroceras pequeñitas fritas con ajos y cayena. Si la cigala esta rica, no os podéis imaginar un poco de pan mojado en ese aceite. El otro día vi una cajita de cigalas congeladas a 10 euros, y como venían 16-18 piezas, me vine arriba e hice la gran inversión. Si bien es cierto que no serán tan sabrosas como frescas, queda un plato excepcionalmente suave y bueno. Le estuve dando muchas vueltas al plato, quería que fuese suave, con un amable sabor a marisco, y una salsa con gran poder de adhesión. . .

Ingredientes (Para 5 personas después de un aperitivo)

10 cigalas · medio pimiento rojo · 2 tomates pelados y sin pepitas · 1 diente de ajo · un puerro · 500 gramos de tagliatelle · 3 yemas de huevo · parmesano rallado· perejil picado

Y ahora, es cuando os cuento cómo. . .  

Aunque las recetas de pasta, las suelo hacer muy rápidas, esta me gusta hacerla dedicándole mucha preparación a los ingredientes. Podéis o no pelar los pimientos y los tomates, pero me parece horrible encontrarme esos pellejos rojos enrollados. . . A preparar los ingredientes!! Quitamos la "camisa" exterior al puerro, lo cortamos longitudinalmente sin llegar a la base, y lo lavamos para quitarle la tierra. Una vez limpio y seco, lo picamos lo más fino posible. Pelamos el pimiento, dicho así parece complejo, pero con un pela patatas es facilísimo. Lo picamos en cuadraditos finos. Con el tomate hacemos lo mismo, pelamos y quitamos las pipas del interior. Cortamos en cuadraditos. Pelamos y picamos finamente el ajo. Ahora es cuando empieza el baile.

En una sartén bien amplia (la usaremos luego para rehogar toda la pasta), ponemos 4 cucharadas de buen aceite de oliva y a fuego medio sofreímos las cigalas. Cuando estén todas hechas (aproximadamente 4 minutos) las vamos sacando y reservando. Echamos en la misma sartén el puerro finamente picado y bajamos el fuego, no queremos que se caramelice, solo que se haga despacito hasta que quede tierno. Mientras se sofríe el puerro, pelamos la mitad de las cigalas, y en un cazo u olla pequeña, sofreímos de nuevo las cascaras con unas gotas de aceite, y le añadimos agua. No queremos hacer un fumé, solo que suelte todo su magnífico sabor. Añadimos el tomate y el pimiento al puerro y dejamos sofreír lentamente. Aprovechamos este tiempo para ir cortando en trozos gruesos los cuerpos de las cigalas ya peladas. Cuando el tomate, pimiento y puerro estén hechos, añadimos el caldo colado y dejamos reducir (añadiremos como medio vaso de ese caldito). Ponemos en una olla a calentar el agua para cocer la pasta, si os ha quedado caldo, añadirlo a la olla ¡No lo tiréis! Cuando hierva el agua, añadimos la pasta y la cocemos un minuto menos de lo que nos diga el paquete (Tiene que quedar "molto al dente", esto es un poco dura). Reservamos un poco del agua de cocción, y escurrimos la pasta. Rehogamos en la sartén con el sofrito, y le añadimos el agua de cocción reservado. Cuando la pasta se haya bebido esa agua, probamos el punto de cocción, y si está de nuestro agrado, añadimos los cuerpos de las cigalas cortados y dejamos saltear medio minuto más. Mientras batimos las yemas de huevo junto con el parmesano. Rociamos con el perejil, y movemos bien. Apartamos la sartén del fuego hasta que se temple y añadimos sin parar de mover las yemas de huevo. En los plato ya tendremos dispuestos las cigalas enteras, echamos una buena cucharada de pasta encima de la cigala, y corriendo a la mesa.



Espero que os haya gustado. Un abrazo para todos.